Actuaciones

Última de las tres corridas que componían esta gira por tierras de Castilla León para Guillermo Hermoso de Mendoza y que se ha saldado con una nota más que positiva. En esta ocasión era en la corrida del día de San Pedro en Zamora donde volvía a ejercer de testigo de alternativa de un  joven rejoneador, en esta ocasión de Víctor Losa y el navarro volvió a la senda de las puertas grandes.

Primer toro sin mucha acometividad, pero con nobleza. Faena en la que Guillermo llevó todo el peso y consiguió muy buenos pasajes, como los quiebros de ECUADOR muy celebrados en el tendido y las dos buenas banderillas montando a BASAJAUN. Una faena basada casi toda ella en la suerte de clavar o en las reuniones porque el toro como decimos no galopaba en busca de los caballos. Pinchó en una ocasión y eso dejó en una sola oreja, una faena que por pulcritud y limpieza hubiera merecido algo más.

Y todavía menos acometividad tuvo el segundo, mucho más parado, también noble, pero excesivamente estático. Labor entera inventada por Guillermo y sus caballos, con banderillas al sesgo, sin apenas unos cortos tramos de galope de costado y ajustando las piruetas porque MALBEC se arrimaba al toro. El último tercio la labor de JUSTICIERO fue la de un banderillero de cuatro patas tirando del toro para sacarlo de las tablas y colocarlo en suerte para dejar las cortas y el par a dos manos. Rejón de muerte fulminante, el mejor de la tarde y dos orejas en una jornada en la que a Guillermo le tocó colocarse el mono de trabajo y sacar todo y más de los que los toros apenas tenían.